..... a ponerse las alpargatas que lo que viene es joropo ...

SOBRE LA MARCHA
Por ELIDES J. ROJAS L.

¿Qué viene ahora? Peligro

16.11.2013
01:55 PM

Es la pregunta que hace todo el mundo. Y la respuesta varía según la posición que tenga quien la responde. Como ocurre en el país desde hace muchos años. Polarización total, con menos grado que cuando el comandante estaba vivo, pero persiste la división. No en dos toletes como suele decirse sino en tres. Los no alienados comienzan alinearse y esa noticia es muy mala para Maduro y sus cubanos.

La estrategia de los cubanos de atacar al sector comercio y prácticamente quebrarlo para completar el cuadro de honor de los culpables del hambre del pueblo, sigue obteniendo un buen grado de aprobación pero dentro del mismo oficialismo. En la oposición hay claro rechazo y en los no alineados también, con la diferencia de que sí hacen la cola para comprar cualquier cosa y aprovechan la mantequilla que les puso Maduro. Así que una primera respuesta apunta a que el chavismo, sin su líder fundamental desde hace meses, sufrirá una derrota descomunal el próximo 8 de diciembre. Perderá en votos y perderá un importante número de alcaldías de ciudades clave, aunque intente descabezar a los candidatos tipo Mardo en Aragua o Cocchiola en Carabobo.

Ya este no es el chavismo inderrotable. Es tramposo como lo ha sido siempre. Igualmente tiene el control del CNE, pero no hasta el punto de desaparecer los votos contrarios cuando son suficientes y numerosos. Así que probablemente, según la bolita mágica, quedará al descubierto como la minoría que es después de la muerte del caudillo. Son minoría, pero se conducen con la mano férrea de quien cree tener una mayoría tan amplia como para abusar de la gente. No podrán seguir con esa fiesta. Los cubanos tendrán que bajarle el ritmo a Maduro y comportarse como gente democrática y negociadora si es que quieren permanecer en el poder.

Pero está el problema económico en que los hermanos Castro metieron a Venezuela. El petróleo en caída libre, no solamente en precios sino en producción, no le permite a los cubanos seguir sacando dólares para sus cuentas y para medio mantener a los isleños comiendo mal, pero comiendo. Las divisas no alcanzan para seguir importando tanto como para mantener abastecido el mercado nacional no solo en alimentos sino también en los demás elementos necesarios para una vida normal: medicamentos, repuestos para vehículos, piezas para maquinarias industriales o rubros tan elementales como equipos electrodomésticos para el hogar. Llegamos a una situación pre Cuba. No falta sino el empujón final: el corralito bancario. Todo lo demás ya está instalado. Intente salir del país para que vea lo difícil que es. Imagínese que las líneas aéreas de mayor peso decidan terminar de reducir las frecuencias ante la falta de pago del gobiernito. Con eso basta. Sin vuelos y sin divisas. Peor incluso que los cubanos. Para eso no falta sino un par de meses.

Un chavista de la categoría ciego de perinola dirá que estamos en la etapa de transición antes del perfecto socialismo. Los enchufados principales dirán que se trata de una guerra económica gestada por la oligarquía y la oposición. Y, al final, la realidad se impondrá. Hambre pareja y el potencial peligro de un estallido social. Ahí mismito. Sin que esto signifique crear zozobra. Tan claro como si el gobiernito de los cubanos lo estuviera provocando. Peligro a la vista.

Muy claro.


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