SOBRE LA MARCHA
Por ELIDES J. ROJAS L.

Puro gamelote

01.10.2013
12:26 PM

Es toda una maravilla la revolución en materia de hablar paja. Es un potrero completo. Y no es un recurso nuevo. Ya se sabe que este gobiernito es una mala copia del cubano, incluyendo el liderazgo y el estilo del sátrapa principal del Caribe, Fidel Castro; quien se hizo famoso en los tiempos en que podía hablar por lo largo de sus discursos y por lo coherente de su estafa. Tan es así que logró esclavizar a un pueblo, doblegarlo, hacerlo pasar hambre, encerrarlo, hacerlo pobre casi a nivel de mendigo y, al mismo tiempo, mantenerlo en plan de esperanza viva y creyendo que todo lo estaba haciendo para derrotar al imperio y ganar un puesto entre los países más dignos del mundo.

Como se sabe perfectamente a estas alturas, es paja. Paja loca. La realidad es otra muy distinta. La larga historia del criminal del Caribe engañando a los cubanos, debidamente sucedido por su hermano Raúl Castro, otro zángano asesino, es que lograron construir un pobre país, literalmente uno de los países más pobres del mundo. Donde desde que usted llega de visita, especialmente en sus zonas turísticas, salen los  mendigos socialistas pidiéndole desde los zapatos hasta la crema dental o, lo que parecen niñas, ofreciendo sus servicios en el área profesional conocida como jinetera entre los isleños. Una calamidad. No hay nada. Hay un poderoso mercado negro. Los nacionales no tienen derecho a disfrutar de las instalaciones ejecutadas por la inversión extranjera, principalmente España. Nada de eso. Un cubano de la plebe es una especie de esclavo sin más derecho que los incluidos en la tarjeta de racionamiento y algunos beneficios derivados del "todo es gratis", que a la hora de la verdad, con ese concepto, ha levantado a toda una sociedad gobernada por el espíritu del vividor, del tírame algo. Eso se ve dentro de la isla y se nota con mucho énfasis en el tipo de relación que mantiene el gobierno cubano en el exterior. Se vivieron a la URSS, ya muerta por el fracaso del comunismo. Se vivieron a Chile, con otro rumbo desde que lograron dependerse del machorreo cubano en los 70 y muchos años después de la feroz dictadura que les dejaron. Pero pudieron salir.

Así que más de 50 años después, muy por encima, se puede afirmar que el modelo de los criminales Castro está podrido desde hace muchos años. Un ruidoso fracaso histórico que apenas sobrevive gracias a lo que se llevan de Venezuela, con todo el gusto de los títeres y de los militares, quienes también están bajo el dominio de los hermanitos criminales. La copia, entonces, por lo que se está viendo en Venezuela va muy bien.

No hay fusilamientos, pero hay 20 mil muertos por año víctimas de la violencia. Hay presos políticos, hay refugiados, hay huidos del país, hay perseguidos. Hay millones tratando de hacer sus vidas en tierras extranjeras. Y, dentro de Venezuela, lo que hay es justamente que no hay. No hay trabajo, no hay comida, no hay ni papel tualet como ya se sabe. Pero tenemos patria, según le gusta decir a los maduristas. Y pronto, según dijo el propio Maduro, ante el colapso que se avecina, habrá más y más socialismo y el que se resbale irá preso. Todo en medio de un país quebrado, con la inflación más alta del mundo y con una unidad monetaria llamada bolívar que no sirve ni como sustituto del papel tualet.

Mientras tanto, horas y horas de paja oficialista en los medios del régimen intentando sustituir una realidad que se los está comiendo.

Twitter: @ejrl